Especial de Nicolás Litvinoff para el Diario La Nación
Con la reciente suba de tasas de interés dispuesta por el Banco Central, que elevó el piso del 91% a 97% anual, muchos ahorristas se sienten tentados a incrementar sus inversiones en pesos para obtener montos jugosos todos los meses
En un escenario financiero en permanente transformación, los ahorristas buscan opciones seguras y rentables para hacer crecer sus fondos.
Los plazos fijos son desde siempre una de las opciones más populares en Argentina, puesto que los riesgos de perder dinero son muy bajos, siempre y cuando no se tenga en cuenta la inflación.
Con la reciente suba de tasas de interés dispuesta por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), que elevó el piso del 91% a 97% anual, muchos ahorristas se sienten tentados a incrementar sus inversiones en pesos para obtener montos jugosos todos los meses, pero antes de inclinarse por esta opción deben comprender sus características y riesgos.
En nuestra nota de hoy, analizaremos en detalle qué son los plazos fijos bancarios y cómo se ven afectados por las nuevas tasas de interés establecidas por el BCRA. Además, pondremos el foco en un aspecto clave: ¿cuánto necesitarías invertir en un plazo fijo para obtener un sueldo mínimo sin necesidad de trabajar? Esta pregunta es fundamental para quienes buscan generar ingresos pasivos y asegurar su sustento económico.
El objetivo es brindarte información valiosa para que puedas tomar decisiones financieras bien analizadas y maximizar el potencial de tus inversiones.
¡Comencemos!
Plazos fijos bancarios: cómo debe analizarlos un inversor
El análisis acerca de si conviene o no colocar dinero a plazo fijo suele realizarse en términos relativos, comparando su rendimiento con la proyección del dólar y buscando determinar cuál de estas operaciones (plazo fijo o compra de dólares) nos puede poner más a resguardo de la inflación.
El plazo fijo ofrece una opción de inversión más accesible y segura, respaldada por la entidad bancaria donde realizamos el depósito y por el Banco Central.
A través de la tasa de interés que cobramos, buscamos proteger nuestro capital y obtener rendimientos conocidos con anticipación y regulares en el tiempo.
Mediante la compra de dólares (hoy en día la opción del dólar MEP es la más elegida por los inversores para eludir el cepo) es considerada una forma de protegerse ante la inflación creciente y preservar el valor de los ahorros con dinero en moneda extranjera.
Aunque puede presentar cierta volatilidad, el dólar ha sido históricamente una divisa de referencia y un refugio de valor en momentos de incertidumbre económica.
En este contexto, muchos inversores calculan la TEA (Tasa Efectiva Anual) actual para la inversión en un plazo fijo bancario a un año (con renovación cada 30 días y reinversión de los intereses percibidos) y comparan el rendimiento con el valor al que proyectan que estará el dólar MEP en el mismo período.
La flamante TNA del 97% se transforma en una TEA de 154% bajo las siguientes premisas: se coloca el plazo fijo a 30 días y, al vencimiento, se lo renueva por el monto total, sin retirar capital ni intereses.
Al momento de escribir esta nota, el dólar MEP cotiza en 474 pesos. Si de acá a un año su valor aumenta hasta los 1.204 pesos (lo que equivaldría una apreciación del 154%), ambas inversiones estarán empatadas. Si el valor de la divisa no llega a ese nivel, habrá convenido colocar el dinero en plazos fijos de 30 días (siempre y cuando la TNA no baje del 97% actual) y lo contrario habrá sucedido si el dólar termina superando la meta de los 1.204 pesos por unidad en mayo de 2024.
Como aclaramos brevemente en el párrafo anterior, la principal premisa de este análisis es que las tasas de los plazos fijos se mantengan constantes durante los próximos 12 meses, algo que muy difícilmente suceda. Esto no quiere decir que no suceda un cambio a favor de los plazos fijos y las tasas vuelvan a subir para generar rendimientos aún más altos, aunque eso podría significar que la inflación sigue desbocada o que el dólar se torna cada vez más incontenible.
¿Cuánto necesitás invertir en un plazo fijo para ganar un sueldo mínimo sin trabajar?
Hechas las aclaraciones pertinentes y con más instrumentos para decidir si una parte de los ahorros merecen colocarse en plazos fijos, pasamos a calcular los rendimientos actuales en números totales.
Hoy el sueldo mínimo formal supera levemente los 84.000 pesos. Por lo tanto, con una Tasa Nominal Mensual (TNM) del 8,08% (equivalente a una TNA del 97% que se divide por 12 meses), calculamos que se necesitan 1.040.000 pesos invertidos para obtener el monto buscado (84.066 pesos mensuales de intereses).
Si bien la cifra que necesitamos puede resultar alta para algunas personas, debemos en cuenta que estamos hablando de solo 2.194dólares (calculados al tipo de cambio del dólar MEP). Esto se debe a que el sueldo mínimo medido al mismo tipo de cambio en Argentina es muy bajo: apenas 177 dólares mensuales.
En este punto, es importante reflexionar sobre las diferencias entre generar ingresos pasivos a través de inversiones y obtener ingresos a través del trabajo.
Mientras que el trabajo implica dedicación de tiempo y esfuerzo continuo, las inversiones pueden generar ingresos (a veces, ganancias reales) sin necesidad de realizar en forma constante una actividad.
No obstante, debemos tener en cuenta que las inversiones también conllevan riesgos. Uno de ellos tiene que ver con el impacto de la inflación en nuestro capital: aunque los intereses generados por un plazo fijo pueden proporcionar un ingreso mensual más o menos interesante, lo cierto es que el poder adquisitivo del monto original invertido se irá devaluando con el tiempo si no reinvertimos los intereses o si los reinvertimos, pero la inflación supera la rentabilidad obtenida.
Por este motivo, en el cálculo que hacemos mes a mes necesitamos incorporar una comparación entre lo que podíamos adquirir con nuestro capital antes y lo que podemos adquirir ahora, de forma tal de saber si nuestro capital fue ganando o perdiendo poder adquisitivo.
También es importante tener en cuenta otros factores, como las posibles variaciones en las tasas de interés mencionadas anteriormente y la disponibilidad de alternativas de inversión que ofrezcan mejores rendimientos o, a igual rendimiento, impliquen menor riesgo.
Diversificar las inversiones nos puede ayudar a minimizar los riesgos y maximizar su potencial.
Conclusión
Conseguiste el millón de pesos necesarios. ¿Es momento de trabajar menos e invertir en plazos fijos para empezar a cumplir el ansiado sueño de vivir de rentas?
Te diría que no vayas tan rápido. En primer lugar, vivir más o menos tranquilo con un sueldo mínimo o un poco más constituye un desafío prácticamente imposible de cumplir en Argentina. Por el otro, difícilmente estas tasas se mantengan en el tiempo y los riesgos de una devaluación están siempre a la vuelta de la esquina, más aún cuando las reservas del Banco Central flaquean como pocas veces en la historia.
Resulta evidente que invertir en una moneda como el peso, que se devalúa velozmente, implica riesgos enormes. La inflación constante erosionando el poder adquisitivo del dinero y la incertidumbre económica generan un ambiente poco propicio para el crecimiento financiero sostenido a largo plazo.
La opción de utilizar los plazos fijos como ingresos adicionales a los laborales, diversificando al mismo tiempo en inversiones en moneda dura (dólar) luce como una opción mucho más inteligente.
¡La seguimos la semana que viene con más análisis económico y financiero para tu bolsillo!
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